Ya que se está
acabando el 2016, que tal si hacemos un repaso por los cinco estilos
decorativos que más se han llevado este año.
Y estos cinco estilos han sido:
El estilo Brooklyn caracterizado por: una paleta de colores
en calma, las paredes al descubierto o con los inconfundibles azulejos
apaisados, la calidez lumínica, que crea al instante una sensación de hogar. Conocido también como estilo Brownstone por la gran presencia de
esta piedra rojiza en su edificación, los suelos hidráulicos se alternan con
superficies de madera envejecida, sacos de café que hacen las veces de cojines,
iluminación de los años de Edison y mucho ladrillo blanco. Velas que suplen un
envoltorio prudente con olores de la infancia, frascos corpulentos de cristal y
texturas níveas.
El estilo Memphis caracterizado por: tonos redondos,
estampados gráficos y concepción lineal. Hay que concebir la decoración casi
como una viñeta de cómic. La reedición de clásicos como la lámpara Super o el gabinete Carlton de Ettore Sottsass se
funden con propuestas inéditas basadas en los wallpapers,
las alfombras-cuadro y el mobiliario que te harán vibrar.
La madera: la madera ha vuelto a florecer en la
construcción. Su maleabilidad para conseguir formas geométricas o esculpir
espacios diáfanos son solo algunas de las cualidades que adquiere en decoración
indoor. Aporta luminosidad al
instante y combina prácticamente con todo. Este estilo reside en incorporar
paneles de madera (con o sin tratar) como un papel pintado más. El efecto double wood (madera sobre madera)
también ha hecho estragos en estancias privadas, fusionando las vetas del suelo
con las líneas puras de los muebles nórdicos mid-century.
El origami: se ha podido ver durante este año la utilización
de esta técnica originaria de Japón para decorar diversos espacios como
restaurantes o establecimientos. Es capaz de aportar un volumen inédito a una
hoja transformándola en figuras sencillas, pero de una gran belleza armónica.
Su efecto tridimensional se ha visto en recubrimientos de pared simulando el
terciopelo o la loneta y en objetos como la cerámica en blanco o los tonos
pastel.
Las paredes se transforman en paraísos orgánicos: la utilización de los materiales como el bambú, la rafia o las maderas secadas al sol de revestimiento se han utilizado para crear tu propio jardín en casa. Otra opción ha sido los papeles pintados de motivos vegetales como palmeras, o incluso animales como tigres.
Las paredes se transforman en paraísos orgánicos: la utilización de los materiales como el bambú, la rafia o las maderas secadas al sol de revestimiento se han utilizado para crear tu propio jardín en casa. Otra opción ha sido los papeles pintados de motivos vegetales como palmeras, o incluso animales como tigres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario